Tuvimos el placer de conocer a Henry, un joven de 31 años de edad, originario de Chiapas y quien, desde niño, le ha tenido un eterno amor a los colores azules.
Su historia
Henry jugaba futbol amateur cada semana, todo inició con un dolor de pierna, dolor al cual no le prestaba mucha atención; sin embargo, un día en un partido de futbol al momento de patear el esférico, le dio un dolor tan fuerte que creyó que era un tirón y esto provocó que saliera del campo e inclusive se alejará de las canchas.
En julio de 2016, fue a atenderse al médico ya que el dolor iba en aumento, ahí le comentaron que tenía un tumor maligno y que ya se encontraba en una etapa terminal, la solución que el doctor le recomendó tanto a Henry como a su esposa era que le pidieran a Dios, porque ya todo estaba complicado.
Actualmente Henry lleva cinco quimioterapias, además, tiene a un pequeño hijo de año y medio, quien se encuentra en Chiapas con la madre de su esposa.
En diciembre el pequeño vino a México, ya que compañeros del trabajo de Henry le pagaron el boleto a su hijo para que pasara las fiestas navideñas en compañía de sus padres.
Finalmente, una de sus ilusiones era conocer en persona a los jugadores, por lo que nos visitó en las instalaciones de La Noria. Los milagros existen Henry.